Estamos en una relación tóxica con el plástico. El material no es el problema, sino cómo y cuánto lo usamos. Ocho millones de toneladas de plásticos ingresan cada año al mar. El 80% proviene de los residuos que generamos en las ciudades, por lo tanto, como habitantes del planeta tenemos un gran rol dentro de la causa y SER Positivo no quiere quedarse afuera.
Para crear este nuevo #DesafioPositivo, convocamos a Luciana Gil, artista, activista ambiental, y fundadora de @waterjourny una movida dedicada a proteger los océanos. ¿Te animas a convertirte en una heroína anti-plásticos esta semana?
Desafío anti-plástico
Con la excusa de conectar con lado positivo de la vida, te proponemos como #DesafioPositivo seguir este plan para conocer tus hábitos de consumo y volverte más sustentable.
DÍA 1: Sentibilízate con la causa. El primer paso es determinar el propósito detrás de este nuevo cambio de hábito. La sustentabilidad se refiere a lo que se sustenta en el tiempo y para que esto sea posible tus intenciones deben estar claras y sólidas.
DÍA 2: Realiza una auditoría interna en casa. Registra el baño, cocina y escritorio para evaluar la cantidad de productos plásticos que consumes. Durante este proceso, es posible que encuentres muchos envases vencidos hace tiempo, cremas viejas, lapiceras sin tinta, condimentos en desuso. Vamos a pedirte que los separes y los confines en un lugar para evaluar la dimensión y el espacio que ocupan. Este ejercicio ayuda a tomar consciencia y planificar cómo reemplazarlos por otros, ya que la clave de este proceso no reciclar, sino reducir la cantidad de plástico que compramos. Es probable que también incentive tu creatividad para elegir otras opciones, mejorar tus costumbres y mejorar estilo de vida.
DÍA 3: Organiza la separación de tus residuos. Como regla general todos los plásticos domésticos de tu auditoría podrían ser reciclados. Por eso el próximo paso es incluirlos en la separación de residuos. El proceso de separar la basura en casa es un gran primer hábito para empezar a cambiar nuestra relación con el plástico, porque nos otorga perspectiva y realidad. Se recomienda separar los productos y objetos limpios, secos y destapados en tres categorías: vidrio, plásticos y cartón y papel. La primera vez suele resultar movilizante observar todo el residuo que puede generar una sola persona pero realmente sirve de catalizador para conectar con la causa. Guarda todos tus productos en una bolsa o caja.
DÍA 4: Arma un plan de reemplazos. No te limites a pensar productos del hogar, también incluye opciones que puedas llevar contigo al salir de casa. Algunos básicos recomendados por Luciana.
DÍA 5: Planifica el destino de tus plásicos. Si vives en una casa o tu edificio aún no se organizó para reciclar, hazte un momento en la semana para llevar tus residuos hasta los puntos o cestos municipales más cercanos, o incluso devolvérselos al productores o almaceneros a quienes les hayas comprado. Es importante que los entregues limpios y secos. Separar la basura no significa reciclar, el proceso de reciclaje sucede en las cooperativas donde se transforman los residuos en materia prima. Tus reciclables los recibe una persona y los ingresa en un complejo sistema de producción y tú eres parte de una cadena de valor muy importante para el ambiente.
Como dice Luciana, no necesitamos miles de recicladores perfectos, necesitamos miles de consumidores conscientes.
¡Atención, el desafío no termina aquí!
Historia inspiradora
Luciana Gil es una artista, arquitecta y activista ambiental dedicada a proteger nuestros océanos con su trabajo. Practicando Standup Paddle en el Rio de la Plata, Buenos Aires, comenzó a preocuparse por la contaminación plástica y juntar residuos con sus propias manos. Creó @water.journey para comunicar su causa e inspirar a vivir en conexión con la naturaleza.
Uniendo consciencia y creatividad, llevó a su algunas piezas plásticas que rescató en la orilla, las higienizó, desinfectó y las clasificó por tamaño y color. Y así, a través de la técnica de collage, comenzó a generar sus originales obras de arte, que hoy expone en muestras, eventos para marcas y agencias de sustentabilidad.
Desafío creativo ¡comienza a jugar! Durante un mes junta plásticos domésticos y, como Luciana, genera tu propia obra de arte. Puedes pintarlos y pegarlos con algún material resistente.
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